En 13 años el Gobierno de Venezuela engruesa el Estado
La velocidad con la que ha crecido la mano de obra en el sector público ha sido muy superior con respecto a la del sector privado, pese a que este último sigue concentrando el mayor número de personas.
Las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) indican que la nómina pública se incrementó 5.4 por ciento entre noviembre 2012 e igual mes de este año contra un crecimiento de 1.6 por ciento en el sector privado.
La diferencia es aún más marcada si se comparan los datos del mes pasado con noviembre de 2000. En 13 años, la nómina pública registra un incremento de 108.5 por ciento, al pasar de 1,285,523 trabajadores a 2,680,498 empleados en la actualidad.
6.6% es la reducción del empleo en el sector privado de Venezuela en los últimos 13 años. Esa reducción fue bien absorbida por el Estado.
Nomina es insostenible
El rápido crecimiento de la nómina del sector público ya ha sido objeto de reflexiones por parte de algunos funcionarios, quienes han planteado la necesidad de revisar el peso que tiene para el Estado asumir la nómina pública. Aunque en la realidad siguen sin adoptarse políticas.
En tanto, el sector empresarial ha exhortado al Gobierno a flexibilizar algunas limitaciones y brindar mejores garantías de estabilidad. Al respecto, el Ejecutivo ha arreciado en el último mes con fiscalizaciones en el sector comercial, una de las áreas que más empleo ha generado, y sigue sin reactivarse el tejido industrial.
En cambio el sector privado lo hizo de forma más pausada. En igual período, el empleo en el sector privado en general creció apenas 31.5 por ciento. Esta cifra incluye a empleados, patronos, trabajadores por cuenta propia, miembros de cooperativas, ayudantes familiares y sociedades de personas.
Hace 13 años, 7,865,355 personas formaban parte del sector privado y hoy llega a las 10,346,503 personas.
EMPLEO DE SECTOR PRIVADO PIERDE FUERZA
Aunque en valores absolutos el sector privado es muy superior al público, la realidad es que ha perdido fuerza en el mercado laboral y así lo reflejan los datos del INE.
En noviembre del año 2000 quienes se desempeñaban en el sector público representaban 14 por ciento del total de ocupados para la fecha (9,150,878 personas). Mientras que hoy en día equivalen a 20.6 por ciento del universo de individuos que tenían trabajo el mes pasado (13,027,001 personas).
En contraste, el sector privado pasó de agrupar el 86 por ciento del total de ocupados en noviembre de 2000 a 79.4 por ciento actualmente.
En los últimos años, el sector público ha tenido la suerte de desenvolverse en otras condiciones favorables en comparación con el sector privado, pese al impacto que esto representa en las cuentas fiscales.
Desde 1999, el Estado ha venido asumiendo la contratación progresiva de personal, con mayor énfasis desde 2007, producto de múltiples factores como la política de expropiaciones y la expansión de ministerios, institutos y fundaciones.
Por el contrario, el sector privado ha tenido que desarrollarse con una serie de factores, como controles de cambio, de precios, leyes con cargas impositivas y amenazas de expropiación, que han repercutido en menores inversiones.
ESTADO ASUME ROL PATRONAL INNECESARIO
Para algunos especialistas laborales esta situación debe llamar la atención, pues las inversiones son fundamentales para el crecimiento sostenido de la economía y de la calidad del empleo. Consideran que el Estado no puede asumir el rol patronal ya que representa una carga innecesaria.
Justamente, la nómina de empleados ya está pasando factura al Estado. Tan solo en el último año, los pagos laborales se incrementaron 90,000 millones de bolívares, según las cifras oficiales. En 2013, se destinaron 307,000 millones de bolívares al pago de salarios y pensiones y hace un año fueron 216,000 millones de bolívares.
Buena parte de estos fondos provienen de créditos adicionales que aprueba la Asamblea Nacional, pues los ministerios y los entes adscritos hacen sus solicitudes para paliar las insuficiencias presupuestarias.