Los biopolímeros a base de hialurónico y toxina botulínica nunca han tenido licencia para ser comercializados en el país, pero su uso se ha mantenido causando graves daños a los pacientes que se lo aplican y en algunos casos ha causado la muerte.
Por este motivo, la Contraloría Sanitaria del Ministerio de Salud ha realizado más de 5 mil inspecciones en peluquerías, centros estéticos y clínicas en el país para minimizar la venta ilegal de esta sustancia; en el recorrido han cerrado más de 200 establecimientos por venta y aplicación de biolpolímeros lo que ha causado mucha preocupación, aunado a estos los últimos casos sonados en la prensa.
El Ministerio del Poder Popular para la Salud está cocinando la resolución que prohibirá la venta de los biopolímeros en todas sus formas, según lo anunció el contralor de dicho ministerio, Divis Antúnez, quien aseguró que se mantienen en conversaciones en mesas técnicas entre el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo, Seniat, Guardia Nacional, Cicpc, entre otros involucrados para combatir la distribución ilegal de estos productos.
